HIDROCINESITERAPIA
La terapia acuática como mejora de la calidad de vida
Verónica Lorenzo Acosta
Profesora en Educación Física
Registro N° 785246
Los seres humanos somos concebidos en un medio acuoso. En un pequeño mundo y dentro del vientre materno, se inicia nuestro desarrollo y crecimiento.
El líquido amniótico nos envuelve, contiene, recorre e impulsa. Nuestros cuerpos guardan cientos de sensaciones de esos tiempos de tibieza en la piel y arrullos compartidos.
Es por eso que, cuando hacemos contacto con el agua cálida, nuestra mente inconsciente trae al presente esas experiencias conocidas y percibidas en el inicio de nuestra historia.
El agua es además el elemento de la naturaleza más abundante del Planeta Tierra y es un componente esencial para la vida.
Como otros tantos remedios naturales ha sido también utilizada en aplicaciones con fines terapéuticos, las cuales se han realizado como procedimientos curativos desde el principio de la humanidad.
La Hidroterapia, palabra que proviene de los vocablos griegos hydro (agua) y therapeia (terapia), significa tratamiento mediante el agua y usa la misma como vehículo curativo en diferentes formas y a temperaturas variadas.
La hidrocinesiterapia es una técnica de hidroterapia, entendida desde una perspectiva global y es un programa de recuperación de la salud que propone actividades acuáticas con fines de trabajo puramente correctivos-preventivos, aprovechando las propiedades físicas que el medio acuático presenta y está dirigida a compensar y tratar problemáticas osteo neuromusculares, y dar tratamiento a lesiones agudas o patologías crónicas.
Es sabido que el éxito en las intervenciones hidroterápicas no reside propiamente en el agua en sí, sino en lo que resulta de aplicar sobre el cuerpo humano, estímulos térmicos y mecánicos.
Una de las características más interesantes del agua es su capacidad de almacenar (retener) y transmitir calor.
En hidrocinesiterapia se utiliza el agua en el llamado «punto indiferente» donde el cuerpo humano no siente ni frío ni caliente el medio conductor térmico experimentado, por lo que la acción térmica será nula y corresponde a una temperatura del agua entre 33-35 °C. Es allí donde la persona siente un estado de agrado y placer, necesarios para conseguir bienestar y concentración durante la realización de posturas y ejercicios que serán indicados durante el tiempo de sesión.
Vale aclarar que por tratarse de un medio particular con condiciones distintas a las del aire, estará contraindicado para aquellas personas irradiadas recientemente o que presenten quemaduras severas, infecciones, lesiones micóticas, de oído, perforaciones timpánicas, heridas en la piel, catéteres, problemas cardio respiratorios no estables, enfermedad renal (pérdida de fluidos), hipotensión o hipertensión severa, presión arterial inestable no controlada, probabilidad de ataque repentino, entre otras.
Obtendremos del programa de hidrocinesiterapia efectos beneficiosos gracias a las propiedades físicas y mecánicas que se dan en el medio acuático y que se describen a continuación:
- Ley de Flotación basada en el Principio de Arquímedes: «Todo cuerpo sumergido total o parcialmente en un líquido en reposo, experimenta un empuje hacia arriba igual al peso del volumen del líquido desalojado«.Gracias a esta ley, el cuerpo al sumergirse en una piscina experimenta una fuerza de empuje ascendente igual a la fuerza de la gravedad pero que actúa en dirección opuesta denominada empuje, lo que provocará que el peso quede reducido en diferentes porcentajes según el nivel de inmersión en que se encuentra, por lo cual a mayor profundidad el cuerpo pesará menos y las articulaciones estarán sometidas a menos sobrecargas. Esta fuerza de empuje podemos utilizarla de tres formas diferentes: como resistencia, asistencia o para ejercicios en suspensión.
- Presión Hidrostática, basada en la Ley de Pascal: “La presión que ejerce un fluido sobre un cuerpo inmerso en reposo, es exactamente igual en toda la superficie”.Esto hace entre otras cosas, que necesitemos realizar una actividad muscular permanente para mantener estable el equilibrio.
El efecto de las dos leyes nombradas anteriormente, da a las personas una sensación de liviandad y facilita la realización de movimientos.
- Cohesión: Es la fuerza de atracción que sucede en moléculas vecinas del agua.
Adhesión: Es la fuerza de atracción de moléculas vecinas de diferentes materias (cuerpo y agua). - Tensión superficial: Es la fuerza de atracción que sucede entre moléculas en la superficie de un fluido que hace que se forme esa piel elástica que se visualiza en la superficie del agua en reposo de una piscina.
- La Viscosidad: Es la fricción entre moléculas de un líquido que producen resistencia al flujo del mismo.
Las moléculas de agua tienden a adherirse al cuerpo que se mueve en ella provocando una resistencia hidrodinámica que determinará la fuerza que el cuerpo necesita para sostenerse o movilizarse.
A todo esto se agregan los factores hidrocinéticos que al estimular los exteroceptores, consiguen un efecto sedante y analgésico.
La compresión que produce el agua, se da a nivel venoso en las cavidades corporales y a nivel muscular, lo que provoca una gran relajación muscular y múltiples efectos fisiológicos. Entre los más importantes encontramos:
- Sistema neuromuscular: Disminuye la sensibilidad periférica, aumenta el umbral de dolor, permitiendo contrarrestar la rigidez y el logro de un trabajo más concreto en cuanto al desarrollo y conducta motriz. Hay una constante retroalimentación entre la información que presta el agua y el sistema nervioso. Los receptores cutáneos propioceptivos, están en constante estimulación lo que favorece la integración del registro en todos los sentidos y se logra una normalización del tono muscular.
- Sistema respiratorio: Activación de la musculatura inspiratoria. Aumenta la demanda de oxígeno y la liberación de dióxido de carbono.
- Sistema circulatorio: Hay una vasodilatación periférica, por lo cual aumenta el aporte de oxígeno y nutrientes a los músculos. Se da una redistribución de oxígeno con desplazamiento a los vasos del tórax entre 600 y 700 ml. Favorece el aumento del retorno linfático.
- Sistema renal: Mejora la liberación de productos de desecho metabólico.
- Sistema músculo-esquelético: Aumenta el riego sanguíneo tisular, facilitando su oxigenación y la eliminación de productos de desecho. El peso corporal se siente disminuido en comparación con lo que sucede en el medio terrestre, mejorando la amplitud de movimiento y disminuyendo la sobrecarga articular. Se reducen los edemas, mejora la densidad ósea y será significativa la ventaja para aquellas personas a las que les resulte complicado realizar ejercicios en tierra.
Son importantes también los efectos psicológicos: mejora de la autoestima y la autoconfianza gracias a la sensación de libertad y movimiento, se logran realizar desplazamientos y ejercicios que no se conseguirían fuera del agua, recuperación del ánimo y el equilibrio emocional, propicia una actitud de superación a través de la vivencia del trabajo en un entorno diferente y motivador, que rompe con rutinas habituales de tratamiento.
Es particularmente relevante el trabajo de reeducación postural acuática e higiene postural que puede proponerse en la población de personas con acondroplasia y displasias esqueléticas que causan enanismo (ADEE). En especial, vinculado a la atención y prevención en el abordaje de las desalineaciones que suelen darse, que imposibilitan la adecuada función biomecánica en general (de grandes articulaciones cadera, rodillas, tobillos, hombros, codos, columna vertebral y pequeñas articulaciones muñecas, manos, pies).
Sumado a lo anterior, puede verse favorecido el abordaje en búsqueda de liberación articular, cuando se presentan patologías específicas que causan reducción en los espacios interarticulares (discopatías, bloqueos, compresión nerviosa, etc.) y en la preparación física necesaria previa y posterior a una cirugía programada.
Son muchos los estudios científicos que sustentan y fundamentan las infinitas virtudes que presta el abordaje en hidrocinesiterapia como tratamiento, el que se diseñará siempre a partir de la confección de una detallada anamnesis y bajo prescripción médica.
Haremos referencia a continuación a los objetivos terapéuticos, los cuales serán propuestos respetando las individualidades de las personas participantes considerando las distintas problemáticas y alteraciones posibles que pueden presentarse, algunas de ellas anteriormente comentadas.
Columna vertebral
Estenosis toracolumbar, que puede manifestarse con dolor, claudicación de la marcha, hormigueos, debilidad y signos clínicos de falta de fuerza, e hiperreflexia.
Objetivos: Disminuir la carga sobre la columna vertebral, favorecer la flexibilidad, mejorar y mantener la movilidad, estimular la propiocepción y la postura, mejorar el balance muscular, fortalecer la pared abdominal, estabilizar la zona lumbo pélvica, favorecer control de cabeza y tronco, recuperar estabilidad articular, disminuir contracturas, elongar músculos del tronco, etc.
Extremidades
Genu varum y genu valgo (desalineación con o sin torsión tibial interna), alteración de la marcha, dolor en rodillas, asimetrías de miembros inferiores. Malformación en cadera y acortamiento de cuello de fémur. Extensión limitada de los codos .Problemas ortopédicos. Cirugías de alineación y elongación de extremidades superiores e inferiores.
Objetivos: Preparación física previa a pre quirúrgicos y atención física de rehabilitación post quirúrgica, favorecer la analgesia, mejorar la amplitud articular y rangos de movimiento articular, mejorar el equilibrio, evitar riesgo de sobrecargas e impactos articulares y caídas, favorecer extensiones de todas las articulaciones, relajación del sistema nervioso, normalización del tono muscular, atención emocional y de ansiedad, etc.
Sistema respiratorio y trastornos respiratorios del sueño
Insuficiencias respiratorias, pequeño volumen torácico, escasa reserva pulmonar.
Objetivos: Practicar ritmos respiratorios, estimular la función diafragmática y demás músculos inspiratorios, incrementar la demanda de oxígeno y la producción de dióxido de carbono (la inspiración se ve facilitada en el agua y la espiración asistida), favorecer la elasticidad pulmonar, etc.
Dolor y función
Tratamiento de algias que se presentan por múltiples factores.
Objetivos: Estimular el efecto analgésico (posible gracias al aumento de la circulación sanguínea y la mejora de la oxigenación muscular y la disminución de la sensibilidad de los nociceptores), favorecer la relajación muscular, etc.
Actividad física para control del peso
Riesgo elevado de sobrepeso y obesidad, predisponente a apneas del sueño, dolores de espalda y articulaciones, movilidad reducida y trastornos metabólicos.
Objetivos: Desarrollar la potencia y resistencia cardiovascular de modo que la musculatura no se fatigue, retrasar aparición de fatiga, aumentar la elasticidad a nivel de tejidos periarticulares evitando las cargas, mejorar la percepción del esquema corporal y la coordinación motriz, percibir disminución de peso corporal que da la ingravidez y la facilitación del movimiento que anula la sensación de realizar ejercicios forzados, desarrollar variadas habilidades motoras, recuperar autoestima, fortalecer musculatura, miembros inferiores y abdominal, etc.
Conclusión
Es misión de quienes llevamos adelante esta tarea, comunicar y dar información acerca del desarrollo de esta actividad física acuática terapéutica y sus innumerables beneficios, con el fin último de difundir que es posible mejorar la calidad de vida de las personas mediante su práctica.
Es mi deseo hacer un aporte con la redacción de este artículo y destacar finalmente que los servicios de recuperación y promoción de salud en las personas, solo son posibles bajo una mirada holística y empática que contemple al ser humano en esa dimensión bio-psico-social-espiritual que lo abarca y lo completa.
Referencias bibliográficas